Últimamente se venía escuchando en los corrillos taurinos de estos pagos que había muchos problemas en la capital del "torico" para llevar a cabo su Feria Taurina. Motivo: La empresa de Manolo Martín había dejado deudas el año pasado y por tanto mientras no las saldase no se podría hablar de una programación nueva, como además parece lógico. El asunto no está fácil. Carmelo Moya se hace eco del tema hoy en El Periódico de Aragón y algunas alarmas han saltado, pues, además, la novillada del 23 de abril (San Jorge) se ha pospuesto por obras en la plaza de toros y algunos han interpretado tal acontecimiento de reparación de puertas en palcos como signo de mal agüero. Pero la sangre parece que no va a llegar al río pues Ayuntamiento y Empresa han acordado las condiciones de pago de la deuda y la Feria 2011 continúa en período de formación. Los veedores de Manolo Martín han estado cumpliendo con su trabajo en Guadalest, Juan Pedro Domecq, Lagunajanda, Jaralta, Martelilla y Conde de la Corte para elegir tres corridas a pie y en El Canario y El Capea para la tarde de rejones. Habrá, además, dos novilladas picadas, una de ellas la retrasada de San Jorge, y se contará con toreros aragoneses en combinaciones que si cuajan pueden ser sorprendentes.
De momento el parche puede servir para este año, pero urge arreglar el tema de Teruel, una ciudad con mucha afición pero que no acude a su plaza, especialmente las Peñas que hace mucho tiempo que desfilan hasta el mismo coso y luego se quedan en la calle sin entrar. Y esto no es de ahora, el público no ha visto cumplidos sus deseos y al final ha optado por caerse del cartel. La Feria no es rentable y la Empresa no está contenta. Quizá habría que programar únicamente festejos del gusto del público aunque sean menos de los comprometidos en el pliego. En fin, esto hay que solucionarlo porque se quiere que haya toros muchos años. De momento 2011 parece que no peligra.
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